viernes, 10 de agosto de 2012

Con un par de tacones


Los dragones, si volvieran leerían este blog, escrito por estas siete señoritas: Connie Jett, Irene Comendador, Alicia Perez Gil, Regina Roman, Carol Scandiu, So Blonde y Nicasia.

Con un par de tacones un recorrido por el mundo de estas mujeres

miércoles, 8 de agosto de 2012

Idea para un cuento I


El tipo se hacia a la idea de que las minas más hermosas nunca le darían bola.
Es así como un día vio a una mujer de unos ojos azules  profundos, con una melena castaña, unas tetas y el creía que un culo que rajaban la tierra. Se acerco a la mesa del bar de Braulio y se presento – Quizás mi presencia la incomode pero no se asuste, mis intenciones nunca son buenas, mi nombre es Julio, cuál es su gracia?
Entre aturdida y sorprendida la mujer contestó – Que formas de presentarse…  pero si quiere saber, soy Eulalia, aun cuando todos me conocen mejor como la renga.
Pasadas las presentaciones de rigor entraron en una espiral de frases subidas de tono y terminaron en la casa de la renga a puro revolcón. La pata de la izquierda, a los pies de la cama era un poco más corta que las otras tres.
Así fue como Julio decidió buscar nuevos horizontes amorosos. Fue conociendo morochas, rubias y coloradas, tetonas, culonas, de piernas largas, con ojos verdes, negros y castaños, mujeres dulces y simpáticas, fogosas, algunas un poco caprichosas. Todas al principio un poco tímidas, pero luego se iban soltando, relajando y se entregaban al placer.
Tenían nombres hermosos, nombres perfectos, de diosas antiguas, de mujeres de la nobleza o de estrellas de cine, las menos afortunadas habían ligado el nombre de alguna tía abuela. Pero Julio les dio a todas un nombre especial, para él eran la tuerta, la sorda, la mudita, etc, etc, etc.